Son ideales para decorar cosas pequeñas, los extremos de portarretratos delicados (que pueden ofrecerse como sou-venirs), tapas de cajitas de madera, pequeños llaveros, imanes, etcétera.
Y son extremadamente fáciles de hacer. Se amasa pasta de un color tenue y se la corta en tiras de aproximadamente medio centímetro de ancho. Se enrolla sobre el extremo de un alambre encolado, hasta formar la florcita. Pueden hacerse dos hojitas sobre las que se pegará la pequeña rosa.
martes, 27 de octubre de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario